Los heridos y triunfadores que dejó el golpe de timón de Manuel José Ossandón en el Senado
La elección de Ossandón en el Senado crispó los ánimos en Chile Vamos y, en particular, en Evópoli, partido en que milita Felipe Kast, quien fue derrotado en la elección por su par de RN. En el oficialismo, por el contrario, celebran volver a la mesa directiva y haber evitado a Kast en la presidencia.

Minutos antes de que se iniciara la sesión, la sala del Senado estaba semi vacía. Sólo un pequeño grupo de legisladores, entre los cuales se encontraba Sebastian Keitel (Ind.), Ximena Rincón (Demócratas) y Rojo Edwards (PSC), estaba presente en el hemiciclo a la espera de la votación de la nueva mesa directiva de la Cámara Alta.
En ese momento, entró a la sala del Senado Manuel José Ossandón (RN), el protagonista de la jornada. Serio, un poco acelerado, el legislador RN tomó su asiento en el hemiciclo junto a sus pares de coalición.
Sin embargo, esta vez no fue recibido con la fraternidad que acostumbra provocar. ¿La razón? El senador por Santiago fue en contra de su misma coalición y partido para hacerse de la testera del Senado. Y lo consiguió.
Con 28 votos a favor, Ossandón —que estaba acompañado por su hermana, la diputada Ximena Ossandón— se erigió como nuevo presidente de la Cámara Alta sucediendo a José García Ruminot (RN).
Los apoyos al legislador provinieron principalmente desde la alianza de Gobierno: las bancadas del PS, PPD, la DC, el único senador FA, Juan Ignacio Latorre, y la independiente Fabiola Campillai, se inclinaron por la opción de Ossandón; además de los social cristianos Juan Castro y Rojo Edwards, la republicana Carmen Gloria Aravena, y los descolgados de RN, María José Gatica y Alejandro Kusanovic.
Su contendor fue el senador Felipe Kast (Evópoli) quien contaba con el apoyo —en el papel— de RN y la UDI, además de los Demócratas. Pero a pesar de tener mayoría en la sala (27 votos) la oposición no supo llegar a acuerdo y además de perder la presidencia —así se sintió en Chile Vamos— la vicepresidencia quedó en manos de Ricardo Lagos Weber (PPD).
“El legítimo ganador de la elección de presidente es el actual senador Manuel José Ossandón y hay que respetar las instituciones. Pero hoy celebra la izquierda, porque sin tener los votos logra sumar tres votos, cuatro votos, para hacerse de la presidencia del Senado”, lamentó el senador tras sólo recibir 21 respaldos de sus pares.
Los ganadores y perdedores de la improbable elección de Ossandón en el Senado
El comentario inevitable en el Senado fue que, con el acuerdo alcanzado entre Manuel José Ossandón, los descolgados de oposición y el oficialismo, el gran ganador fue el Gobierno del presidente Gabriel Boric.
La alianza de Gobierno, en los días previos a la votación, sostuvo conversaciones con Ossandón, pero también con quienes promovieron la candidatura de Felipe Kast. Rodrigo Galilea, presidente de RN (partido en que milita Ossandón) fue el encargado de negociar con el oficialismo tras constatar que Kast no concitaba la mayoría absoluta que necesitaba para erigirse como líder de la testera.
Con ese antecedente en mano, Galilea hizo el mismo ofrecimiento que Ossandón: la vicepresidencia para un senador del Socialismo Democrático.
Sin embargo, al tener las dos ofertas en la mano, el cálculo del oficialismo fue que con Ossandón existen más garantías en términos de ecuanimidad y entendimiento político. No es un secreto para nadie que la figura de Kast es profundamente resistida por la alianza de Gobierno, dado su estilo confrontacional y las polémicas que ha protagonizado con ministros de Estado durante su conducción en la Comisión de Hacienda.
Y, por otra parte, en el oficialismo no olvidan cuando la oposición rompió el acuerdo administrativo en 2024 y le arrebató la presidencia a Pedro Araya (PPD). De hecho, uno de los argumentos al proponer a Lagos Weber, fue que se “hiciera justicia” por lo ocurrido el año pasado.
En la vereda contraria, los lamentos —y las críticas— se multiplicaron. Evópoli, incluso, emitió un comunicado a nombre del partido cuestionando en duros términos a Ossandón y los senadores que lo respaldaron.
“Estas alianzas circunstanciales alejadas de los principios y convicciones políticas de largo plazo dañan la estabilidad y unidad de la oposición. Lo sucedido en el Congreso es un claro ejemplo de cómo decisiones oportunistas pueden debilitar los compromisos fundamentales”, señalaron desde el partido.
Ossandón, por su parte, respondió cuestionando las credenciales de Evópoli, calificándolo como un “partido minoritario”.
“RN es el partido más grande de Chile Vamos, porque somos 20 veces más grandes que Evópoli. Un partido minoritario de Chile Vamos, no puede tener la representación más importante de este país”, sostuvo el nuevo presidente del Senado.