
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró que se “reducirá sustancialmente” los aranceles que le impuso a China y manifestó su optimismo con respecto a las posibilidad de llegar a un acuerdo con el país asiático.
En una conferencia de prensa en el Despacho Oval, el mandatario norteamericano partió diciendo que “vamos a ser muy amables, ellos también lo serán, y veremos qué sucede“.
Bajo este contexto, Donald Trump sostuvo que el actual arancel de 145% a los productos provenientes de China, en definitiva, “no será tan alto“.
Dichas declaraciones se dan después de que el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, asegurara que el conflicto arancelario contra China “es insostenible”, por lo que es previsible “una desescalada”.
Siguiendo en esa línea, el Gobierno de EE.UU. espera cerrar acuerdos con las mayoría de los países a los que impuso gravámenes, cuya guerra comercial se desató particularmente por un pulso con China.
El mandatario norteamericano expuso durante la semana pasada que estaba en conversaciones con representantes chinos, con el objetivo de alcanzar un acuerdo en las próximas semanas. Por otro lado y bajo este contexto, Xi Jinping mantiene los aranceles de 125% a Estados Unidos.
En este sentido, el secretario de Comercio de EE.UU., Howard Lutnick, quien defendió la tregua arancelaria, se unió a Bessent para influir en las decisiones de Trump en el marco de la guerra arancelaria.
Por su parte, el portavoz de Exteriores de China, Guo Jiakun, manifestó que EE.UU. debe “dejar de ejercer presión” y mostrar “respeto” si es que desean resolver sus disputas comerciales.