
Tres hombres enfrentarán a la justicia en Estados Unidos, luego de ser acusados de secuestrar y matar de hambre a su hermano menor, tras lo cual convivieron con el cadáver durante dos días antes de dar aviso a las autoridades.
De acuerdo con lo reportado por los medios norteamericanos, los acusados fueron identificados como los hermanos Christian Baseme, de 30 años, Pierre (26) y Azane (23), quienes ataron a la cama al menor de la familia, Ezekiel, de 18 años, tras lo cual le negaron el agua y la comida hasta provocarle la muerte.
La policía informó que el hecho ocurrió en noviembre de 2024 en en la ciudad de Cedar Rapids, en el estado de Iowa, aunque las autoridades solo ordenaron la detención de los implicados el pasado 28 de marzo.
El testimonio de los detenidos tras matar de hambre a su hermano
En sus declaraciones, los tres sujetos acusados de matar de hambre a la víctima apuntaron que su hermano había actuado de manera extraña durante semanas, hasta que el 3 de noviembre tuvo un episodio esquizofrénico durante el cual, según los detenidos, les dijo que escuchaba voces y los amenazó.
Según argumentaron los hermanos, luego que una noche escapó de su habitación y amenazó a vecinos, decidieron amarrarlo a la cama por su propia seguridad. Aseguraron a la vez que era Ezekiel quien se negaba a comer y beber, e incluso en una ocasión en la que lo soltaron para que comiera y tomara agua, él los atacó.
Relataron que el 6 de noviembre se percataron que Ezekiel no estaba respirando, aunque su corazón seguía latiendo, pero la mañana siguiente notaron que el cuerpo de su hermano estaba frío.
Aseveraron que solo el día 8 de noviembre asumieron que el joven había muerto, luego de que comenzara a “hincharse y oler”, aunque dieron aviso de lo ocurrido recién un día después.
La versión de los agentes policiales indicó que al llegar al lugar se percataron que Ezekiel Baseme había muerto algunos días antes y que el cadáver presentaba un avanzado estado de descomposición.
En su reporte, el forense que analizó el cuerpo planteó que su deceso se vinculó a complicaciones de probable hambre y deshidratación en un entorno de restricción física.
Los tres hermanos detenidos por la muerte del joven fueron acusados de homicidio involuntario, lesiones graves y encarcelamiento forzoso.